SANTA ROSA.- La madre de un niño de 12 años que pesa 106 kilos denunció que hubo discriminación en la decisión que tomó una escuela de La Pampa, donde su hijo fue cambiado de turno y retirado de clase a pedido de las autoridades, que advirtieron que el alumno golpea a otros nenes que se burlan de su volumen y temen que "mate a alguien".

El Ministerio de Educación provincial aseguró que iniciará una investigación para dilucidar qué sucedió en la escuela 205 de la localidad de Toay.

El niño dejó de concurrir a clases durante 10 días, luego de ser suspendido por haberle pegado una trompada a un chico que se burlaba de él. El lunes regresó a la escuela, pero las autoridades volvieron a llamar a la madre para que lo retirara.

Su madre, Rosana Rassera, admitió que "ahora lo único que hace es estar tirado en la cama, en la computadora o comiendo".

La mujer sostuvo que su hijo fue discriminado en la escuela y retirado a pedido de la directora Norma Rossi, quien, según la madre, "dijo que tenía temor de que el chico matara a alguien".

Rassera relató que el niño, que pesa 106 kilos, padece obesidad desde los 4 años y afronta un tratamiento por afección en la tiroides, sufre el hostigamiento y burlas de otros nenes a diario.

"Las maestras me decían que mi hijo era un perseguido y que tenía que dejar de ir a la escuela", dijo la mujer.

El alumno que cursa el sexto grado fue cambiado del turno matutino al de tarde en los últimos meses, tras haber sido suspendido por pegarle una trompada a un compañero que se mofaba de él, apuntó la madre.

"Me hicieron sacarlo del aula y también la directora quiso que le firmara un papel donde constaba que yo lo retiraba", añadió la mujer, y contó: "Escribí que mi hijo se retiraba del establecimiento porque la directora no quería que fuera". (Télam-DYN)